Campañas ligadas al cuidado ambiental: ¿La publicidad puede ser sustentable?

Campañas ligadas al cuidado ambiental: ¿La publicidad puede ser sustentable?

La publicidad está cambiando en relación al cuidado del medio ambiente y va virando a pantallas digitales: ¿cómo afecta al negocio de los anunciantes a la hora de elegir los espacios y formatos?

Beeyond, la plataforma de publicidad programática digital OOH (Out of Home por sus siglas en inglés) con mayor cantidad de dispositivos conectados en América, hizo un análisis sobre cómo las campañas sostenibles impactan positivamente y garantizan un mayor recordamiento de marca por parte de los consumidores.

“En un mundo donde la conciencia ambiental es cada vez más importante, las campañas de publicidad en vía pública digital no sólo buscan captar la atención de su audiencia objetivo, sino también contribuir positivamente al medio ambiente”, dice Maria Natalia Giménez, Sales Director OOH para Argentina de Beeyond, “El enfoque en campañas sostenibles garantiza que las marcas se destaquen no solo a nivel creativo o en un contexto urbano, sino que también demuestran su compromiso con la responsabilidad ambiental y mayor recordación por parte de los consumidores”.

Con la premisa de “reducir el Impacto ambiental y maximizar el impacto publicitario”, analizaron algunas acciones para lograr este impacto:

Tecnología eficiente: Identificar y seleccionar únicamente pantallas LED y digitales de alta eficiencia energética. Esto permite lograr una reducción significativa del consumo de energía, disminuyendo la huella de carbono de la campaña.

Programación inteligente: Implementar un sistema de programación que active las pantallas solo durante los horarios de mayor afluencia peatonal o vehicular.  Esto permite optimizar el uso de la energía, reduciendo el desperdicio y el impacto ambiental en momentos de baja exposición.

Energía renovable (cuando es viable):  La constante búsqueda en colaborar con proveedores que utilicen energía solar o eólica para alimentar las pantallas publicitarias, nos ofrecen una contribución directa, permitiendo la reducción de la dependencia de energía no renovables, alineando la campaña con prácticas verdaderamente sostenibles.

Hoy, las grandes corporaciones del mundo tienen lineamientos ambientales igual de rigurosos que los de calidad. Y aunque en Argentina todavía no es obligatorio, las marcas lo exigen. No por obligación, sino porque es un diferencial competitivo.

En definitiva, la publicidad sustentable ya no es solo “una buena idea”, es una exigencia de los nuevos consumidores, inversores y mercados. Hace 20 años, nadie miraba el consumo energético de una heladera. Hoy elegimos por etiqueta A o B. Lo mismo está pasando con la comunicación: se evalúa no solo el mensaje, sino cómo lo emitimos. Las marcas ganan una  reputación sólida, tienen mayor conexión emocional con sus audiencias y logran un posicionamiento estratégico frente a consumidores conscientes. En algunos países, además tienen acceso a beneficios fiscales y financiamiento verde.

Así como la transparencia y la credibilidad mejoran la imagen de marca y es un diferenciador clave en mercados sensibles al medio ambiente, en algunos países ser sustentable permite acceder a incentivos de financiamiento y beneficios fiscales. La propuesta de valor hacia las marcas debe de ser completa: desde una responsabilidad ambiental + una plataforma sólida para que las marcas se conecten con una audiencia cada vez más consciente del medio ambiente, potenciando su imagen y engagement a largo plazo.

Este enfoque ligado al DOOH (Digital Out Of Home) asume como compromiso e invita a la creación de campañas que no solo capturen mercados, sino que también cuiden el futuro del planeta. El DOOH (Digital Out Of Home) puede —y debe— evolucionar hacia una lógica de triple impacto: visibilidad + eficiencia + propósito.