Con este proyecto, Fenix busca que otras empresas desarrollen este modelo de solución energética y contribuyan con el cuidado del medio ambiente. La nueva planta permitirá reemplazar el 100% del hidrógeno gris que consume la central. Además, la planta fotovoltaica asociada al proyecto proveerá la energía para los consumos del edificio administrativo ubicado en Chilca.
Fenix inició operación de la primera planta de hidrógeno verde instalada en una central eléctrica a nivel nacional. El proyecto, que consistió en la implementación de una planta fotovoltaica y un electrolizador, representa para el Perú un avance exponencial en el desarrollo y la promoción de este combustible limpio y 100% renovable.
Esta planta -ubicada en la central termoeléctrica de Fenix en Chilca- contribuirá a impulsar el avance de esta tecnología en el país; así como demostrar que es una excelente alternativa para descarbonizar diversos procesos industriales, incluido la generación eléctrica.
“En Colbún impulsamos el hidrógeno verde como un paso importante en la transición energética responsable; tenemos la convicción que es una de las mejores opciones para ir adaptando y modernizando las centrales en base a gas natural, considerando que este es el combustible mejor situado para apoyar la transición energética y el despliegue de las energías renovables. Con Fenix, hemos logrado ser la primera central eléctrica del Perú que utilizará hidrógeno verde permitiendo así incorporar nuevas tecnologías para minimizar impactos ambientales. Estamos enfocados en seguir impulsando el desarrollo de diversas aplicaciones de hidrógeno en la región, parte de la estrategia de Colbún de avanzar en la internacionalización de sus operaciones”, señaló José Ignacio Escobar, CEO de Colbún, empresa matriz de Fenix.
Por su parte, Juan Miguel Cayo, gerente general de Fenix, resaltó que con el uso del hidrógeno verde reducirá la huella de carbono de la central termoeléctrica, dando paso a un futuro más sostenible para todos; y a mediano plazo se espera replicar este modelo de proyecto como una solución que promueva el uso de esta energía limpia en sus clientes.
Fenix mencionó que uno de los principales beneficios de su central de hidrógeno verde es la reducción de su huella de carbono en unas 70 toneladas de CO2 equivalente al año. También, permitirá a la empresa generadora de energía un ahorro de aproximadamente US$ 50 mil anuales debido al auto abastecimiento de hidrógeno, el cual servirá para refrigerar los generadores de la central térmica en Chilca.
Asimismo, se precisó durante la inauguración que se utilizará el agua de mar desmineralizada empleada para los procesos de generación eléctrica de la termoeléctrica en Chilca. Gracias a su expertise y tecnología, Fenix cuenta con el insumo hídrico suficiente para producir el hidrógeno verde, con una huella hídrica cero.
Según estudios de la Asociación Peruana de Hidrógeno (H2 Perú), el país tiene un gran potencial para desarrollar hidrógeno verde, aumentando su competitividad para los años 2040 y 2050. Las regiones norte y sur son los principales potenciales centros de producción gracias a sus recursos renovables.
En tanto, los principales centros de consumo se ubican en los departamentos de la costa y en la región sur del país, donde operan empresas mineras y de manufactura, que representarían un alto potencial de penetración de hidrógeno como el reemplazo de combustibles fósiles. Así, el hidrógeno verde podría jugar un papel clave en la descarbonización nacional.
Las principales aplicaciones en las que se espera una mayor demanda de hidrógeno verde para los próximos años son: movilidad (lideradas por camiones de alto tonelaje del sector minero y transporte marítimo) y la industria del amoníaco, cemento, acero y la petroquímica.