
Qué dejó la cuarta ronda de negociaciones para acabar con la contaminación por plásticos
En el encuentro se destacó la voluntad general de la mayoría de los países de establecer un tratado sólido con reglas globales vinculantes sobre plásticos nocivos y evitables, así como requisitos comunes de diseño de productos.
En una declaración realizada por Inger Andersen, Directora Ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), se destacó el progreso logrado durante la reunión en Ottawa para avanzar hacia el desarrollo de un ambicioso acuerdo en Busan.
Además, se puntualizó en la importancia de abordar la crisis mundial de la contaminación por plásticos y se hizo un llamado a las Partes involucradas para mantener un compromiso continuo y una flexibilidad que permita alcanzar la máxima ambición en la lucha contra este problema.
Durante la reunión, se avanzó en el desarrollo de reglas para prohibir productos plásticos problemáticos y evitables, pero aún quedó pendiente decidir si el tratado incluirá medidas para reducir la producción y el consumo de plásticos.
Se reconoció que las negociaciones deben acelerarse para estar a la altura de la magnitud y velocidad de la contaminación por plásticos que afecta al planeta, con más de 15 millones de toneladas de plástico vertidas en el océano desde el inicio de las negociaciones.
Eirik Lindebjerg, Global Plastics Policy Lead de WWF Internacional, hizo hincapié en la necesidad de que los países actúen de manera conjunta y efectiva para abordar la crisis de la contaminación por plásticos, destacando la importancia de establecer prohibiciones globales de productos y sustancias químicas de alto riesgo, así como requisitos globales de diseño de productos y un paquete financiero integral para asegurar una transición justa hacia la sostenibilidad.
Los países acordaron llevar a cabo un trabajo formal entre sesiones antes del próximo evento importante (INC-5) en Busan, destinado a impulsar las listas de productos y químicos plásticos nocivos y evitables, el diseño de productos para su reutilización y reciclabilidad, y la evaluación del paquete financiero necesario para implementar el tratado.
A pesar de los desacuerdos persistentes sobre la solidez de las medidas propuestas, se observó un mayor alineamiento en áreas clave como las prohibiciones globales vinculantes, la eliminación progresiva de productos y sustancias químicas de alto riesgo, y la implementación de sistemas de Responsabilidad Extendida del Productor. El desafío actual consiste en traducir esta alineación en textos claros que guíen la implementación del tratado.
Para más información, ingresá acá