Crean la primera planta de tratamiento del líquido cloacal con microalgas en Argentina

Crean la primera planta de tratamiento del líquido cloacal con microalgas en Argentina

AySA y FAUBA pusieron en marcha este proyecto que busca reducir el impacto ambiental y, a partir de la biomasa obtenida del líquido cloacal al tratarla con microalgas, producir biofertilizantes.

El objetivo es estudiar la posibilidad de valorizar la biomasa algal que se cultiva en los reactores de la planta piloto usando como insumo los efluentes cloacales que llegan a la Planta Depuradora Sudoeste de AySA generando beneficios económicos y ambientales. Adicionalmente, se busca corroborar una reducción del costo económico y energético en el tratamiento de aguas residuales con microalgas.

“Este proyecto tiene como enfoque la economía circular. Nosotros estamos revalorizando este producto, porque logramos bajar la carga de nutrientes que tienen los efluentes que ingresan desde la planta a partir de la alimentación de estos microorganismos (microalgas) para que luego puedan ser usados como biofertilizantes. Esto es tanto una innovación como un aporte al cuidado del medioambiente y la economía circular”, sostuvo la bióloga Carolina González, miembro del Centro de Investigaciones de AySA (CIAySA).

 

Por su parte, Agustín Rearte, jefe e investigador de la Cátedra de Química Inorgánica y Analítica de la Facultad de Agronomía, investigador CONICET y director del proyecto aseguró que “Tratar aguas con microalgas básicamente es utilizar organismos fotosintéticos para remover los nutrientes, nitrógeno y fósforo, y así bajar además la carga orgánica de las aguas residuales, tratar el agua y en ese proceso producir una biomasa que puede ser utilizada como biofertilizante”.

El proyecto inició en 2021 y la construcción de la planta a escala piloto finalizó en septiembre de 2022 y a partir de esta fecha ya se encuentra en funcionamiento en el predio de la Planta Depuradora Sudoeste de AySA, donde se realiza el tratamiento de líquidos cloacales provenientes del partido de La Matanza.

Esta planta es operada en conjunto por AySA y la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires y el programa cuenta con el financiamiento del Ministerio de Ciencia y Tecnología. “Es un piloto que en el futuro vamos a escalar para aplicar en algún área territorial donde pueda ser útil desde el punto de vista social con la presencia de AySA y su vinculación con los ámbitos académicos”, agregó González.