Sector energía: ¿cómo abordará la tecnología los retos del futuro?
Por Fabian Bosquiazzo, Global Director of Energy & Utilities de Softtek
El sector energético global está en un punto de inflexión crítico. A medida que se enfrenta a la urgente necesidad de cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las normativas europeas para 2030, las empresas del sector deben adoptar respuestas innovadoras para navegar por una serie de desafíos complejos, según se menciona en el reciente White Paper de Softtek: “Tech Trends: Energy & Utilities.
Dado el creciente reconocimiento social, empresarial y gubernamental de la necesidad de crear un escenario energético sostenible, tanto económico como ambiental para abordar los desafíos futuros, se están impulsando dos transformaciones clave que brindan la oportunidad de construir un nuevo modelo: la transición ecológica y la transformación digital.
Las urgencias más inmediatas del sector son la descarbonización de la matriz energética, la revolución descentralizada, el auge del prosumidor, la transición energética justa y la digitalización, todo ello en tiempo récord, generando un panorama altamente desafiante. Las tecnologías limpias, además de ser competitivas frente a los combustibles fósiles, también representan nuevas oportunidades de desarrollo y crecimiento en un entorno altamente competitivo.
La descarbonización se presenta como una prioridad ineludible para frenar el cambio climático. El sector eléctrico, responsable de aproximadamente el 40% de las emisiones de CO2, se encuentra bajo una presión creciente para reducir su huella de carbono. Es que el impulso hacia las energías limpias es esencial para asegurar un futuro sostenible. Tecnologías como la solar, eólica e hidrógeno verde contribuyen a la reducción de emisiones y ofrecen ventajas comerciales y de inversión significativas.
En este escenario la descentralización energética redefine el paradigma de los sistemas energéticos tradicionales promoviendo modelos más distribuidos y centrados en el consumidor. Este cambio mejora la resiliencia energética, facilita la integración de fuentes de energía renovables y empodera a los consumidores para que se conviertan en prosumidores. Las redes descentralizadas impulsadas por energías renovables y tecnologías como la inteligencia artificial y el blockchain optimizan las operaciones y fortalecen la independencia energética.
La digitalización actúa como el catalizador que permite el avance tanto de la descarbonización como de la descentralización. Las tecnologías digitales avanzadas ayudan a las empresas del sector energético a optimizar el uso de la energía, mejorar la eficiencia operativa y ofrecer servicios personalizados a los consumidores. Esta transformación digital es esencial para mejorar la transparencia y la gestión en tiempo real de los sistemas energéticos, lo que a su vez promueve una relación más cercana y transparente con los clientes.
Transición energética justa
El desafío de esta nueva revolución pasará por desarrollar los logros conseguidos en salud, alimentación, transporte, tecnología e industria desde una visión de eficiencia con los recursos, apuntando a cero impacto en el planeta y sostenibilidad económica para la sociedad y sus ciudadanos. La importancia de una transición energética, concepto que fue introducido por primera vez en 2015 en el Acuerdo de París, favorece el cambio hacia un sistema más sostenible, que sea inclusivo y equitativo. La IA es un aliado indispensable en este camino para la gestión energética, por su capacidad para promover la eficiencia, la sostenibilidad y una transición energética más inteligente.
La posibilidad de procesar y analizar datos transforma la forma en que gestionamos y consumimos energía, apuntando hacia un futuro más consciente para todos en el que ningún sector de la sociedad quede atrás y se pueda fomentar un desarrollo equitativo y sostenible. En este escenario cobra vital importancia la metáfora de “mundo espejo”, que refiere a los gemelos digitales – modelo virtual diseñado con precisión que refleja un objeto gracias a los datos producidos por sensores inteligentes – y a la realidad aumentada. Estas réplicas virtuales de la realidad permiten una comprensión profunda del comportamiento de los modelos. Brindan al sector energético y de servicios públicos la oportunidad de identificar todos los aspectos clave y simular mejoras sin impactar las operaciones reales.
Estos avances están revolucionando el sector energético al permitir el modelado y la simulación de infraestructuras antes de su construcción, evaluar su impacto ambiental y facilitar su integración en la red eléctrica. Cabe destacar también el aporte de la computación cuántica por su potencial transformador y sus aplicaciones prácticas que están llevando a las empresas a invertir en investigación y desarrollo. Esta tecnología abre nuevas posibilidades en todo lo relacionado con los sistemas de cifrado, el uso intensivo de datos, las simulaciones de escenarios dinámicos y complejos, o la generación de algoritmos.
Por todo esto, el sector energético enfrenta un futuro lleno de desafíos y oportunidades en los que las tecnologías limpias y digitales emergen como catalizadores clave en esta transformación, ofreciendo nuevas vías de crecimiento y sostenibilidad. El éxito en esta transformación contribuirá a lograr los objetivos de desarrollo sostenible, mitigar el cambio climático y abrirá importantes oportunidades para la innovación, el crecimiento y el liderazgo en el mercado energético del futuro.