El compromiso con el planeta es una preocupación que, por for-tuna, va en aumento. Cada vez son más quienes se interesan en la necesidad de asegurar calidad de vida para todos los habitan-tes del mundo, los de hoy y las generaciones futuras. El turismo no escapa de esa tendencia universal, y se observa no solo en los cambios en la forma de viajar sino en la importancia que le da la propia industria a tener una visión sustentable de su desarrollo. Ahora los viajeros toman en cuenta variables a las que antes no les prestaban tanta atención para elegir sus próximos destinos: Estar cerca de la naturaleza ya no basta, sino ¿podré acercarme a la cultura local? ¿Mi estadía incidirá de forma positiva o nega-tiva en la calidad de vida de sus lugareños? ¿Mi hotel es susten-table y se preocupa por el entorno? TURISMO SUSTENTABLE