Es un hecho que la Agenda de Desarrollo Sostenible está hace ya tiempo en boca de todos. Tal es así, que si se le pregunta a una amplia porción de alumnos de escuela secundaria sobre los ODSs (Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU) podrían citarlos sin más porque los tienen internalizados de las diversas clases de geografía y economía, desde hace ya algunos años. Las organizaciones deben nutrirse de un proceso similar que les permita, sin ir más lejos, recitar de memoria dichos objetivos y trabajar en sus ejes transversales a conciencia. Profundizar el trabajo en la integridad y transparencia (ODS 16) transversal-mente, de la mano de la diversidad e inclusión (ODS 5) resultarán en un cambio cultural que agregará solidez y sentido de perte-nencia dentro de las organizaciones, públicas o privadas, con o sin fines de lucro. Las organizaciones que toman decisiones basadas en los ejes transversales de la agenda de desarrollo sostenible son orga-nizaciones sustentables en el tiempo y es por eso que generan una protección a su marca y elevan su buena reputación. Esa situación sin embargo debe darse, no por cosmética, sino por un trabajo realizado a conciencia que permitirá afrontar la dis-rupción que avecina un futuro inminente. compliance