Pero, en uno u otro caso, las empresas deben ser conscientes de la importancia de integrar sus KPIs no financieros a la evaluación de sus resultados, para visualizar cada vez con mayor claridad su alcance real. Nada menos que el valor de la marca y la reputación están en juego. Una mirada a largo plazo obliga a poner el foco en algo tan difuso y tan crítico a la vez como la manifestación concreta del propósito de las organizaciones. Misión y valor dejan de ser una declaración de buenas intenciones para verse reflejados en acciones posibles. ECONOMÍA Y FINANZAS SUSTENTABLES