Esto ha generado altos niveles de conflictividad socioambiental que se extienden a lo largo del territorio y que en muchos casos permanecen abiertos de manera indefinida, en un marco donde el Estado, principal garante en materia de derechos, brilla por su ausencia. Estamos en un momento bisagra, en donde la necesidad de pro-mover el crecimiento económico no puede realizarse a costa de sacrificar, postergar, ignorar o menoscabar la protección ambien-tal. Necesitamos cambiar el rumbo y comenzar decididamente a transitar un camino que nos permita superar los desafíos que impone la crisis climática y construir, de manera gradual pero constante, una economía baja en carbono, con inclusión social. Necesitamos comenzar ya mismo. - Andrés Nápoli Director Ejecutivo de Fundación Ambiente yRecursos Naturales (FARN) farn.org.ar