En definitiva, la digitalización redunda en una mayor competitividad de las actividades en las que el agua, tanto en volumen como en oportunidad, es factor clave e insustituible. La cultura hídrica (o del cuidado del agua) es un conjunto de costumbres, valores y actitudes que un individuo o una sociedad tienen con respecto a la importancia del agua para el desarrollo de todo ser vivo, la disponibilidad del recurso en su entorno y las acciones necesarias para obtenerla, tratarla, distribuirla, cuidarla y reutilizarla. Lo importante es no demorar más y promover acciones que permitan preservar este recurso vital. Por Marcelo Ferrero. Director Ambiental de CEDyAT, Docente Ambiental Universitario, Geólogo y Doctor en Costas. - LINKEDIN ►