Gas Natural. “Hay áreas que ya están servidas, en su gran mayoría, con gas natural. Camuzzi es una licenciataria y operamos un servicio que de 1992 para atrás era brindado por Gas del Estado. Hay ciudades que fueron creciendo hacia la periferia naturalmente -por el desarrollo de la propia ciudad-, lo que conlleva la necesidad de incorporar infraestructura. Hay localidades, por ejemplo, en plena meseta chubutense a las que hemos incorporado una infraestructura capaz de poder brindar gas natural u otro tipo de gases. Se trata de comunidades de 100 habitantes, y tenemos muchas historias de pequeños pueblos que tienen acceso a la energía a partir del desarrollo de este tipo de inversiones. Hay casos que puede graficar la importancia de estas inversiones: el año pasado inauguramos una obra muy grande en General Villegas (casi al norte de la provincia de Buenos Aires), que se alimentaba con nuestro sistema de camiones de transporte. Es decir, era una ciudad alejada de los centros de consumo, de los gasoductos troncales y entonces se las sirven con camiones –que cargan energía, las llevan hasta el pueblo, la descargan para su consumo-. Pero esa metodología limita mucho la posibilidad de crecimiento de esas ciudades. Entonces conectamos General Villegas al gas natural, es decir, construimos un gasoducto que le hace vincularse al transporte energético nacional y hoy la localidad puede pensar en un crecimiento a futuro que, de otra manera, no hubiese podido hacerlo. Esta acción implica la llegada del gas natural, más viviendas conectadas a la red y, por supuesto, industrias, comercios, estaciones de GNC, Pymes, etcétera. Actualmente, estamos anunciando una obra en América -también al norte de la provincia de Buenos Aires-, con una inversión de alrededor de 2.700 millones de pesos para construir un gasoducto que la vincule definitivamente con el sistema troncal argentino.